La sostenibilidad es el eje temático del siglo XXI. Por tal razón, nos interesa abordarla desde su esencia para darte a conocer las bases que la sustentan y las claves para lograrla. Acompáñanos en este recorrido hacia un planeta perdurable.
¿Qué es la sostenibilidad?
Se entiende por sostenibilidad al balance logrado entre la población y el medio ambiente. En este ecosistema coexisten dos propósitos que en los últimos años se han vuelto opuestos, pero que se está intentando que vayan de la mano:
- El crecimiento y el desarrollo de la sociedad
- La conservación del medio ambiente
Si se logra el equilibrio deseado para que la sostenibilidad sea posible, la sociedad puede progresar haciendo uso de las innovaciones tecnológicas, sin que ello implique la degradación del planeta ni el agotamiento de los recursos no renovables disponibles.
Por lo tanto, para poder hablar de sostenibilidad, deben darse estos tres elementos:
- Cuidado del medio ambiente
- Crecimiento económico
- Desarrollo social
La pregunta ahora es: ¿Y cómo se logra?
Las seis claves para lograr la sostenibilidad
Si hay algo que no depende del azar, eso es precisamente la sostenibilidad. Lograrla depende de acciones cuidadosamente programadas y de estrategias orquestadas desde el nivel empresarial al doméstico. Es decir, cada acción cuenta cuando se trata de preservar al planeta en el que vivimos para que nos siga sirviendo de hogar durante mucho mucho mucho tiempo.
Entonces, la pregunta de cómo se logra la respondemos con las siguientes seis claves para la sostenibilidad:
- Poner la productividad en segundo plano, no todo vale en el camino de la competitividad
- Apostar por los recursos disponibles
- Ir de la mano con la innovación
- Pausar el uso de los recursos no renovables
- El crecimiento poblacional no puede ir más rápido que el desarrollo de la sociedad
- Compromiso global e individual
Si pensamos en el sector empresarial, es prácticamente imposible pretender que la competitividad no importe y que la productividad es opcional. Sin embargo, si ponemos estos aspectos en primer plano, estaríamos echando por la borda la aspiración de lograr la sostenibilidad. En este aspecto, es crucial el rol que adopten los diferentes gobiernos, puesto que de ellos deben partir las iniciativas, las inversiones y el allanamiento del terreno para que los sectores privados tengan la oportunidad de desarrollarse.
Por otra parte, los recursos no renovables disponibles en la actualidad deben cuidarse con suma cautela. El agua es el recurso que más está peligrando, los últimos estudios han arrojado el alarmante dato de que la escasez de agua está afectando al cuarenta por ciento de la humanidad. Por lo tanto, es imprescindible tomar medidas que fomenten la minimización del uso de estos recursos y el cuidado extremo del agua potable.
Debemos apostar por un uso responsable, inteligente y estratégico de la tecnología. Es necesario asegurarse de que ésta vaya de la mano con la innovación. De esta forma, estaremos recurriendo a soluciones que van de la mano de la sostenibilidad en los diferentes aspectos de la sociedad.
Por último, al pensar en el desarrollo de la sociedad y en el crecimiento poblacional debemos tener en cuenta que para lograr la tan ansiada sostenibilidad, no puede ir más rápido el segundo que el primero y viceversa. Hacerlo guardando el equilibrio ante ambas de manera sostenible conllevará además una mejor en la calidad de vidad.
¿Qué podemos hacer para promover la sostenibilidad?
Es verdad que la sostenibilidad necesita el respaldo de los gobiernos y de las grandes corporaciones. Sin embargo, mediante acciones individuales como el reciclaje, el cuidado de los recursos naturales, la reducción del consumo de energía y la compra de productos fabricados bajo los parámetros del consumo lento, todos nosotros podemos aportar un granito de arena a la vasta playa de la sostenibilidad.